La fusión de la Ciencia Computacional, integrada por las matemáticas aplicadas, la computación y la informática, con las Ciencias de la Tierra, ha dado lugar a una nueva disciplina conocida como Geociencia Computacional. En particular, la Geociencia Computacional nos permite desarrollar programas de cómputo que combinan modelos conceptuales, matemáticos y numéricos con datos de laboratorio y de campo de diferentes escalas espaciotemporales y de diversas fuentes con cierto grado de incertidumbre asociado. Ejemplos de áreas de investigación y desarrollo de la Geociencia Computacional son la modelación matemática, numérica y computacional, los modelos estocásticos espaciales, la computación de alto desempeño; la adquisición, procesamiento y análisis de señales e imágenes; la inteligencia artificial y el aprendizaje de máquina y la generación automática de código.
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